Padre nuestro que estás en los Walmart,
vacío sea tu nombre.

Vengan a nosotros tus gangas
y las ventas han comenzado tanto en Wall Street
como en Main Street. Amén.

Danos hoy un cupón especial para
que podamos seguir nuestro frenesí de compras

y perdona nuestras deudas,
las cuales no queremos ni ver.

De la misma manera, ayúdanos a mostrar la compasión
a aquellos cegados por la codicia.

Danos fuerza para que podemos luchar por la justicia,
desafiando los pecados corporativos,
al igual que David desafió a Goliat en el valle de Elah.
Finalmente, querido Señor,
salva a los trabajadores de todo el mundo
(especialmente aquellos del Walmart)
contra la explotación y la pobreza.