Raúl: | (riendo) ¡Qué romántica tontería! |
Maya: | Tal vez, pero ¿qué daño puede haber en cultivar inocentes ficciones? |
José: | (masticando una aceituna) Entonces, ¿a qué apuntas? |
Maya: | Quizás deberíamos disfrutar de la vida de la misma manera en que leemos un buen libro. Todo relato puede ser maravilloso y fascinante, aun cuando se trate de una mera ficción. |