Encerrados:
Algunas reflexiones sobre el aislamiento psíquico
La mayoría de la gente llega a un punto en el que su cerebro se apaga,
y desconectarse del rugido de la existencia.
Para conservar la cordura en un mundo de locos,
parece sensato buscar refugio.
Algunos encuentran refugio en la bebida, otros en diversos cultos,
otros en ciberrelaciones, y otros alternando con idiotas estrambóticos.
Salir del capullo requiere valentía y confianza.
Aunque la transformación interior parece fácil,
hace falta disciplina para afrontar la incertidumbre y moldear el destino.