¿Qué tipo de conversaciones
están teniendo lugar en tu mente?
¿Están diciendo –
«¡Ah, soy un vejestorio y cascarrabias!»
«¡Soy boba y desatenta!»
«¡Me siento medio muerta y
quiero quedarme en la cama!»
¿O fomentas diferentes diálogos en tu interior?
¿Alientas a las voces que dicen:?
«Me siento entusiasta
y agradecido por cada nuevo día.»
«Respeto a todas las personas
que se cruzan en mi camino.»
«No temo cometer errores.»
Presta atención a esas conversaciones
entre los oídos:
estos diálogos interiores darán forma
a tus esperanzas y temores futuros.