¿Por qué tantos estadounidenses
viven en las tierras míticas de los vaqueros?
¿Por qué se sienten incómodos sin sus biblias
y sus pistolas de doble cañón?
¿Por qué tantos estadounidenses
se ven condenados a percibir un salario mínimo?
¿Cómo puede llamarse 'democrática'
una sociedad de dos clases
si la que la mayoría se ve condenada a la pobreza
desde la cuna hasta la tumba?
Trajinando por las rojas rocas
de las tierras áridas americanas,
alternando entre una lógica superficial
y la demanda de los consumidores,
se diría que el tiroteo final
está a la vuelta de la esquina.